Nota a Luis Zubeldia en el diario de La Pampa

FÚTBOL/LUIS ZUBELDÍA
“Ser entrenador no es jugar sólo 4-4-2”
sábado, 02 de enero de 2010

Visión: el santarroseño dijo que la función de DT no es solamente planificar una estrategia de juego. El oficio es más integral. “Hay que hablar con los jugadores, dirigentes, llevarse bien con los medios… son cosas que se van aprendiendo y he ido resolviendo bastante bien”. Una charla imperdible.

Luis Francisco Zubeldía habló. Se excusó pero habló mejor que antes. Es la evolución del ser humano hecha carne en el rostro de un joven de 28 años que quemó etapas más rápido que otros. No por algo es el DT más joven del fútbol argentino, a 7 años de que su carnet de futbolista profesional se haya vencido cuando su nombre sonaba para reforzar los mediocampos de los clubes más importantes de Europa.
El duelo fue más simple de lo previsto. O él lo hizo más fácil que es distinto. Periodismo Deportivo, entrenador de las inferiores de Lanús, ayudante de Ramón Cabrero y hoy, DT principal, en el inicio del tramo final de su contrato. Si se renegocia o no, es otra cuestión. Pero hay puntas que dio en la jugosa charla de 1h06m en Belgrano, custodiado por Horacio Rosales, presidente, y Gabriel Cardoso, vice y amigo personal de la familia Zubeldía desde la infancia.
“Mi idea es seguir”, dice. “Pero pasa algo. Llevo cuatro años en el fútbol profesional, dos y medio como ayudante de Ramón (Cabrero) y uno y medio como entrenador. Es mucho tiempo, el desgaste es grande”.

Nicolás Russo, presidente de Lanús, lo ha dicho en reiteradas oportunidades y con insistencia en los últimos meses del año que se fue: “Si Luis se va algún día, Gabriel Schurrer va a ser el sucesor”. El propio Luis, hace poco, también dijo que le gustaría tomarse un año “para descansar, hacer un balance y estudiar idiomas”. Son señales de una comunión que parece tendrá su fin en poco tiempo por lo que se ha desprendido de ambas partes.

Sin embargo, la charla con el periodismo local se movió por muchos frentes. Y en estos cuatro años de entrenador el pampeano habló de lo que ser técnico de fútbol en el país. “Ser entrenador no sólo es jugar 4-4-2. Es relacionarse con los jugadores, salir y entrar con esos jugadores, charlar con los dirigentes, tener la obligación de atender a los medios de comunicación. Son cosas que uno va aprendiendo, aunque las he ido resolviendo bastante bien. Empecé con esto a los 24 años y es fascinante por dónde se lo mire”.

- ¿Cómo evaluás el año?
- El balance ha sido muy bueno por donde se lo mire. Hemos jugado cuatro campeonatos en un año, en los números y como experiencia, ha sido muy bueno. Hay que seguir mejorando, tengo contrato hasta junio y ojalá sigamos por este camino.

- ¿Qué sensaciones te quedan de los finales de los campeonatos?
- El fútbol argentino es muy competitivo, ni hablar del fútbol sudamericano. Lanús está haciendo sus primeras experiencias a nivel internacional. Jugar Sudamericana, enfrentar a Liga de Quito en la altura, a jugadores de selección, nos dio una cierta experiencia que esperemos capitalizarla en el semestre que viene con la Copa Libertadores o y de acá a un futuro. El hecho de no obtener un título o no haber llegado a una final o semifinal de una competencia internacional no es que nos amarga y tapa lo bueno que se hizo. Como entrenador fue el que más me sirvió porque me costó encontrar el equipo por distintos motivos y para un entrenador o cuerpo técnico es un desafío. Ojalá podamos pelear hasta el final en los dos torneos, pero campeón sale uno solo y es difícil.

- El contrato termina en junio. ¿Tu idea es seguir?
- Mi idea es seguir. Pero pasa algo: llevo cuatro años en el fútbol profesional, dos y medio como ayudante y uno y medio como entrenador. Si Dios quiere cumpliría los dos años como entrenador, y es mucho tiempo, el desgaste es grande. Ramón (Cabrero) me daba mucha libertad para trabajar con los jugadores, pero hay un punto en donde yo al jugador no le puedo sacar más. Llega a un techo la relación, entonces en la medida en que los resultados acompañen, los dirigentes quieran que siga y si hay un cierto recambio anualmente de determinados jugadores, me quedaría con gusto, porque estoy bien, porque amo a la institución y considero que podré darle muchísimas cosas si existe ese recambio. De lo contrario nos vamos a estancar y no tiene sentido.

- ¿Hoy por hoy hubieses elegido ser técnico a futbolista?
- Sí. Si tengo los dos amores ahí me quedo con este. Pero por edad es como que tenés que pasar por la etapa de jugador. Te da una experiencia y visión por encima de aquel que quiere ser técnico sin haber sido jugador.

- Llegaste a decir que te gustaría parar un tiempo cuando termine tu ciclo para estudiar. ¿No aceptarías una propuesta de trabajo en un club de manera inmediata?
- Lo que decía era que después de la dinámica del fútbol, hay cosas que por ahí te dejan tentar, cosas que te seducen, que te quiere un club grande. Si hay algo que considero que me va a hacer crecer profesionalmente, me sentaría a pensarlo. Pero si tengo que proyectar mi carrera, lo ideal sería trabajar dos o tres años de manera consecutiva y pararme un año para hacer un balance, estudiar idiomas y saber qué hiciste bien y qué estuvo mal. Ruggeri dirigió cuatro o cinco clubes en poco tiempo y hoy está en la edad ideal para dirigir, pero quizá no tiene ganas.

- El ritmo hace que uno no pueda pensar por uno.
- Seguro, pero si yo estoy apurado a los 28 años, ¿qué queda para el resto? Después hay que ver, muchos dicen: “¿Vas a desaparecer del círculo de los técnicos?”. ¿Y cuándo estudio? Yo no puedo, no me da la mente. Si me pongo a proyectar, es eso lo que me gustaría.

- ¿En la proyección está dirigir en el exterior?
- Puede ser. Me seduce entrarle a otra cultura, a otra idiosincrasia, tratar de buscar la vuelta para saber cómo llegarle al jugador. Argentina está en las mejores ligas, más competición que acá no hay. El entrenador argentino, con un montón de desventajas, termina siendo uno de los mejores del mundo, porque es pícaro, porque nace con una pelota, por las cosas que tenemos en cuanto a la formación.

- La de Argentina es una de las ligas más competitivas del mundo, pero ¿se juega bien?
- No, no, no… pero por el exilio de jugadores, porque no das tiempo al recambio. Salvio hace un año y medio que está jugando en primera, y habrá jugado un año completo por la lesión. Y es muy poco. Ya lo piden todos, en junio se estaría yendo y habrá jugado un año y medio en el país. Se termina viendo entonces un fútbol confuso. Demasiado buen fútbol se ve teniendo en cuenta esto.

- ¿Cómo se hace para decir que no?
- En cada jugador hay un mundo, a veces interviene la familia, otras veces el representante… Yo he hablado mucho con Salvio, he hablado de la vida y terminás entendiendo por qué se quiere ir. No porque no le guste Lanús, o porque le seduce más el Atlético Madrid, tiene que ver con algo ya más íntimo. Así les pasa a la mayoría de los jugadores.

“No sé qué le hubiese dicho a Guardiola”

En esta posibilidad de seguir nutriendo de conceptos su cabeza, Luis Zubeldía estuvo a punto de concretar un encuentro con Pep Guardiola, DT del Barcelona, Manuel Pellegrini (Real Madrid) y Unai Emery (Valencia). “La propuesta era concreta y existió… Lo que pasó después fue que de parte de los entrenadores no se pudo dar”, declaró.
“La idea es que cuando tenga más espacio, poder hacer entrevistas, que están más relacionadas con las relaciones, poder hacer charlas con entrenadores del exterior, pero yo necesito tiempo para eso de eso. Los técnicos eran Guardiola, Pellegrini y el entrenador del Valencia (Emery), que es joven y está haciendo muy buenas campañas. No sé si ellos lo saben que quería entrevistarme, pero la posibilidad estaba”.

- ¿Qué le hubieses dicho a Guardiola?
- No sé, ahí está el tema, jaja. .. Para ir a hacer esa entrevista tiene que haber tiempo de ellos, pero no existía eso. Después no sé qué le iba a preguntar.

- ¿Hablás con los entrenadores?
- No… (José) Pekerman y (Hugo) Tocalli sí me han llamado, pero con los otros no. Con ellos hablo, me consultan por jugadores, yo les consulto por algunos jugadores también. Pero con otros entrenadores no hablo.

Fuente: El Diario de La Pampa.