Lanús Boca
Palermo se sacó la bronca y
le dio el triunfo a Boca ante Lanús
El goleador, que el viernes tuvo un confuso episodio con cuatro hinchas, convirtió el segundo tanto del Xeneize. El marcador había sido abierto por Cáceres, mientras que Pelletieri había puesto el empate transitorio. En la visita no estuvo Riquelme y en el local atajó Caranta.
El saludo de Palermo. Un gol para los tres puntos.
Boca le ganó como visitante a Lanús por 2-1, en un partido correspondiente a la segunda fecha del Torneo Apertura. El Xeneize no jugó bien, pero aprovechó los momentos justos para golpear ante un rival complicado que lo tuvo a maltraer durante varios pasajes de la tarde.
En el arranque del encuentro, el conjunto que dirige Luis Zubeldía tomó las riendas e intentó acercar peligro con una fórmula que reiteró durante toda la jornada: el remate desde lejos. Los que probaron sin éxito fueron Eduardo Ledesma, Sebastián Blanco, Eduardo Salvio y Santiago Salcedo.
A los 16 minutos, y en la primera aproximación de la visita, Julio César Cáceres abrió el marcador con un zurdazo letal. El paraguayo había recibido la pelota sin marcas y aprovechó un rebote de un disparo suyo para darle una ventaja hasta allí inmerecida al equipo de Alfio Basile.
La respuesta de Lanús llegó a los 21 con un cabezazo de Agustín Pelletieri, quien apareció solo tras un corner desde la derecha. Un minuto antes, Roberto Abbondanzieri había salvado con sus reflejos un frentazo de Salvio, en lo que fue un aviso por las desatenciones defensivas.
La presión de Lanús mermó y Boca tomó el control de la pelota. El reemplazante de Juan Román Riquelme fue Guillermo Marino, pero el autor de los dos goles ante Argentinos no tuvo claridad y el resto no acompañó: sólo algo de Federico Insúa, quien casi marca con un gran zurdazo.
El Xeneize saltó al campo de juego para el segundo tiempo sin Claudio Morel Rodríguez y Sebastián Battaglia (ambos con molestias) y fueron reemplazados por Luciano Monzón y Ariel Rosada. El inicio fue desconcertante, un equipo perdido y superado en todas las líneas.
El Granate aprovechó el desorden de su rival y controló con claridad las acciones en la primera mitad del complemento. Sin embargo, no aprovechó sus chances -la más clara fue un mano a mano de Salcedo que terminó por encima del travesaño- y pagó caro el hecho de ceder el protagonismo.
En Boca se acomodó Gary Medel en la recuperación, ayudado por Rosada, e Insúa comenzó a asociarse con Marino en el manejo de la pelota. Sin llegar demasiado al arco, más allá de la inexplicable situación en la que Gabriel Paletta no alcanzó a empujarla, los de Basile tenían otra cara.
A los 34 minutos, Martín Palermo ganó de cabeza tras un corner y estampó el segundo. El Titán, que el viernes había protagonizado un confuso episodio en el entrenamiento con cuatro hinchas, se sacó toda la bronca y se convirtió en el héroe que le dio tres puntos clave al Xeneize.
La pelota aérea fue el recurso que mejor le funcionó a Boca, por fallas en la defensa de Lanús y también de Mauricio Caranta, quien enfrentó por primera vez al club de La Ribera desde su polémica salida. El local no pudo reaccionar, más aún sin los ya reemplazados Salvio y Blanco.
Con este triunfo, Boca pudo sonreír por primera vez en un semestre en el que irá por el título para asegurarse estar en la próxima Copa Libertadores. Los números de los del Sur son más alentadores para la clasificación, pero la ilusión de volver a ser campeón sufrió esta tarde un duro golpe.
Fútbol | 31/8/2009 |
Se lo llevaron ellos | |
Lanús cayó ante Boca por 2 a 1 en un cotejo súper parejo. Cáceres y Pelletieri en la primera parte, y Palermo en el complemento, los autores de los goles. |
Lanús no jugó bien, es cierto. No fue el del primer tiempo ante Huracán, ni por asomo. Pero el partido fue otro: mucha fricción, mucha prolijidad, mucho estudio. Boca respetó a Lanús, y lo respetó mucho. La chapa del empate estaba casi puesta, y hasta el Granate parecía mejor perfilado. Pero el oportunismo de Martín Palermo inclinó la balanza a favor de los Xeneizes.
Boca tuvo en Insúa al jugador más importante en ofensiva. En toda la primera parte no se decidieron a tomarlo ni Grana ni Ledesma, y el ex Argentinos, que se ubicaba a medio camino entre ambos, arrancaba siempre con la pelota en los pies y con campo por delante. Por esa banda, el Xeneize volcó su juego sin que Lanús hiciera nada por corregir esa marca. Boca era reiteradamente peligroso por allí, y no se comprendió como Ledesma continuaba pegándose a Pelletieri y Grana no apretaba a Insúa un poco más arriba.
Justamente por esa banda Boca tuvo varios tiros de esquina. Y en uno de esos tantos corners, y luego de varios rechazos, idas y vueltas, que la saco que no la saco, Cáceres quedó en inmejorable posición, con doble chance, para poner a los siempre detestables Bosteros patasucias en ventaja.
A Lanús ese tanto pareció despertarlo. El equipo de Zubedía se paró unos metros más adelante, y tomó las riendas del protagonismo. Rápidamente, tras un centro de Maxinho, casi empata Salvio de cabeza, en inmejorable posición. De esa jugada derivó el tiro de esquina en el que, tras centro de Blanco, Pelletieri ingresó para poner un furibundo cabezazo al fondo de la red. Uno a uno y delirio en el sur.
Esa primera parte se iría justificadamente empardada.
Para el complemento, el Fan del Johnny Walker Red/Black/Blue/Green Label metería dos cambios: Rosada y Monzón por Battaglia y Morel Rodríguez. De nuestro lado, nada. Podía presumirse algún cambio de fichas en una banda derecha que dio muchas ventajas defensivas, sobre todo atendiendo a que Hernán Grana no logra comprender que el fútbol es un juego de equipo, que no se puede eludir a todo cuanto contrincante se pare enfrente y que arriesgar del medio para atrás en la posición en la que se desempeña es como darle a Maguila el Gorila una 9 mm con el seguro fallado.
Lanús fue más que su rival en la primera mitad de esa segunda parte. Intentó por abajo, respetando su estilo. Con Blanco acertando y fallando, pero participando activamente, con Velázquez y Grana trepando por los laterales, con el aporte de los dos medio campistas centrales, más la impronta de Salvio. Lanús dispuso de varias jugadas en las que faltó la puntada final; centros atrás no empujados, bolas que quedaron boyando, alguna falta de precisión y la ausencia de esas pequeñas cosas que hacen a las grandes cosas; algunos la llaman suerte, otros fortuna, y otros estar en el lugar indicado en el momento oportuno.
Boca esperó su momento. Sobre esos veinte minutos finales, se fue acercando al arco de Caranta y a falta de diez, llegaría el gol de Palermo de cabeza, en la única jugada de todo el partido en la que le ganó a Hoyos.
Lanús no pudo ni supo empatarlo. Salvio y Blanco ya estaban fuera de la cancha, hecho llamativo; si pensamos en el préstamo de Valeri, la venta de Sand y la lesión de Lagos, cuesta entender que además Toto y Chuky dejen el equipo, salvo en caso de alguna dolencia o lesión. Ingresaría luego Menéndez por Pelletieri, quien es un especialista en pelotas aéreas ofensivas, medio por el cual Lanús seguramente atacaría en esos minutos finales. La responsabilidad ofensiva quedó en las ganas de Biglieri y en los pies de Aguirre, que poco pudieron hacer, y de Ledesma, que por momentos realiza jugadas Zidanescas y por otros irrita por su lentitud y parsimonia similares a la impronta con la que revocaba un albañil santiagueño que en una época trabajó en casa.
Algunas decisiones no se comprenden, pero de todos modos los que ganan y pierden siempre son todos, tanto el cuerpo técnico como los jugadores, y este cotejo no fue la excepción. Nos quedará en la retina el caño de Salvio a Paletta. Brillante por donde se lo mire, la jugada fue deliciosa y socarrona, con el agregado de haber ridiculizado al surgido de las divisiones pingüinas. No hay que alarmarse. Se perdió un pleito contra un equipo importante, que tiene jugadores significativos. Y Lanús no fue superado, sino que perdió un partido que estaba para igualdad. El barco seguirá su rumbo el miércoles en La Paternal, sin Salvio ni Ledesma. Partido difícil, por las dimensiones pequeñas del campo de juego y porque la ausencia del Toto no es moco de pavo.
El camino es largo, esto recién comienza y las ilusiones están completamente intactas.
Por Maximiliano Asurey
Fuente: www.lanus.com.ar
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Palermo se sacó la bronca y le dio el triunfo a Boca ante Lanús
El goleador, que el viernes tuvo un confuso episodio con cuatro hinchas, convirtió el segundo tanto del Xeneize. El marcador había sido abierto por Cáceres, mientras que Pelletieri había puesto el empate transitorio. En la visita no estuvo Riquelme y en el local atajó Caranta.
Boca le ganó como visitante a Lanús por 2-1, en un partido correspondiente a la segunda fecha del Torneo Apertura. El Xeneize no jugó bien, pero aprovechó los momentos justos para golpear ante un rival complicado que lo tuvo a maltraer durante varios pasajes de la tarde.
En el arranque del encuentro, el conjunto que dirige Luis Zubeldía tomó las riendas e intentó acercar peligro con una fórmula que reiteró durante toda la jornada: el remate desde lejos. Los que probaron sin éxito fueron Eduardo Ledesma, Sebastián Blanco, Eduardo Salvio y Santiago Salcedo.
A los 16 minutos, y en laprimera aproximación de la visita, Julio César Cáceres abrió el marcador con un zurdazo letal. El paraguayo había recibido la pelota sin marcas y aprovechó un rebote de un disparo suyo para darle una ventaja hasta allí inmerecida al equipo de Alfio Basile.
La respuesta de Lanús llegó a los 21 con un cabezazo de Agustín Pelletieri, quien apareció solo tras un corner desde la derecha. Un minuto antes, Roberto Abbondanzieri había salvado con sus reflejos un frentazo de Salvio, en lo que fue un aviso por las desatenciones defensivas.
La presión de Lanús mermó y Boca tomó el control de la pelota. El reemplazante de Juan Román Riquelme fue Guillermo Marino, pero el autor de los dos goles ante Argentinos no tuvo claridad y el resto no acompañó: sólo algo de Federico Insúa, quien casi marca con un gran zurdazo.
El Xeneize saltó al campo de juego para el segundo tiempo sin Claudio Morel Rodríguez y Sebastián Battaglia (ambos con molestias) y fueron reemplazados por Luciano Monzón y Ariel Rosada. El inicio fue desconcertante, un equipo perdido y superado en todas las líneas.
El Granate aprovechó el desorden de su rival y controló con claridad las acciones en la primera mitad del complemento. Sin embargo, no aprovechó sus chances -la más clara fue un mano a mano de Salcedo que terminó por encima del travesaño- y pagó caro el hecho de ceder el protagonismo.
En Boca se acomodó Gary Medel en la recuperación, ayudado por Rosada, e Insúa comenzó a asociarse con Marino en el manejo de la pelota. Sin llegar demasiado al arco, más allá de la inexplicable situación en la que Gabriel Paletta no alcanzó a empujarla, los de Basile tenían otra cara.
A los 34 minutos, Martín Palermo ganó de cabeza tras un corner y estampó el segundo. El Titán, que el viernes había protagonizado un confuso episodio en el entrenamiento con cuatro hinchas, se sacó toda la bronca y se convirtió en el héroe que le dio tres puntos clave al Xeneize.
La pelota aérea fue el recurso que mejor le funcionó a Boca, por fallas en la defensa de Lanús y también de Mauricio Caranta, quien enfrentó por primera vez al club de La Ribera desde su polémicasalida . El local no pudo reaccionar, más aún sin los ya reemplazados Salvio y Blanco.
Con este triunfo, Boca pudo sonreír por primera vez en un semestre en el que irá por el título para asegurarse estar en la próxima Copa Libertadores. Los números de los del Sur son más alentadores para la clasificación, pero la ilusión de volver a ser campeón sufrió esta tarde un duro golpe.
Fuente: www.tycsports.com
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Fuente: www.clarin.com.ar
En el arranque del encuentro, el conjunto que dirige Luis Zubeldía tomó las riendas e intentó acercar peligro con una fórmula que reiteró durante toda la jornada: el remate desde lejos. Los que probaron sin éxito fueron Eduardo Ledesma, Sebastián Blanco, Eduardo Salvio y Santiago Salcedo.
A los 16 minutos, y en la
La respuesta de Lanús llegó a los 21 con un cabezazo de Agustín Pelletieri, quien apareció solo tras un corner desde la derecha. Un minuto antes, Roberto Abbondanzieri había salvado con sus reflejos un frentazo de Salvio, en lo que fue un aviso por las desatenciones defensivas.
La presión de Lanús mermó y Boca tomó el control de la pelota. El reemplazante de Juan Román Riquelme fue Guillermo Marino, pero el autor de los dos goles ante Argentinos no tuvo claridad y el resto no acompañó: sólo algo de Federico Insúa, quien casi marca con un gran zurdazo.
El Xeneize saltó al campo de juego para el segundo tiempo sin Claudio Morel Rodríguez y Sebastián Battaglia (ambos con molestias) y fueron reemplazados por Luciano Monzón y Ariel Rosada. El inicio fue desconcertante, un equipo perdido y superado en todas las líneas.
El Granate aprovechó el desorden de su rival y controló con claridad las acciones en la primera mitad del complemento. Sin embargo, no aprovechó sus chances -la más clara fue un mano a mano de Salcedo que terminó por encima del travesaño- y pagó caro el hecho de ceder el protagonismo.
En Boca se acomodó Gary Medel en la recuperación, ayudado por Rosada, e Insúa comenzó a asociarse con Marino en el manejo de la pelota. Sin llegar demasiado al arco, más allá de la inexplicable situación en la que Gabriel Paletta no alcanzó a empujarla, los de Basile tenían otra cara.
A los 34 minutos, Martín Palermo ganó de cabeza tras un corner y estampó el segundo. El Titán, que el viernes había protagonizado un confuso episodio en el entrenamiento con cuatro hinchas, se sacó toda la bronca y se convirtió en el héroe que le dio tres puntos clave al Xeneize.
La pelota aérea fue el recurso que mejor le funcionó a Boca, por fallas en la defensa de Lanús y también de Mauricio Caranta, quien enfrentó por primera vez al club de La Ribera desde su polémica
Con este triunfo, Boca pudo sonreír por primera vez en un semestre en el que irá por el título para asegurarse estar en la próxima Copa Libertadores. Los números de los del Sur son más alentadores para la clasificación, pero la ilusión de volver a ser campeón sufrió esta tarde un duro golpe.
Fuente: www.tycsports.com
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Fuente: www.clarin.com.ar
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